Un grupo de once docentes de diversos departamentos de EHU impulsarán una iniciativa de apoyo a la investigación interdisciplinar de la Universidad de Salamanca (USAL) para el esclarecimiento de la muerte de Unamuno, en el que participan también el Instituto Aranzadi e investigadores del Instituto de Medicina Legal.
Según ha informado la EHU en un comunicado, los coordinadores del grupo de apoyo, David Hoyos y Jon Bernat Zubiri, han asegurado que "los diferentes indicios de criminalidad en torno a la muerte de Unamuno, en su propia casa y en extrañas circunstancias, interpelan a EHU a participar en la investigación que está promoviendo la USAL".
En sus palabras, la investigación "debe contar con todos los medios necesarios para esclarecer lo que sucedió aquella noche entre el falangista Bartolomé Aragón y un Don Miguel que no había tenido ningún síntoma de indisposición y que había manifestado en varias ocasiones que estaba amenazado de muerte y deseaba escapar del arresto domiciliario al que estaba sometido".
En ese sentido, Aranzadi se compromete a aportar "su conocimiento técnico y su dilatada experiencia para el esclarecimiento de las circunstancias que rodearon la muerte de Miguel de Unamuno, familiar de su fundador, Telesforo Aranzadi".
En la presentación institucional del encuentro que tuvo lugar en el Bizkaia Aretoa, el rector de la EHU, Joxerramon Bengoetxea, recalcó el "componente histórico del proyecto", y puso en valor "la colaboración establecida entre ambas universidades, así como con agentes de gran relevancia en la materia".
Unamuno, según Sorolla.
Por su parte, el director del Master de Conducta Criminal de la USAL, Francisco Javier de Santiago, y la psicolingüista Maria Montfragüe recordaron durante la reunión con el rector y el Gobierno vasco las circunstancias en los que sucedieron los hechos en los dos últimos meses de vida de Miguel de Unamuno: "el arresto domiciliario al que estaba sometido, las amenazas de autoridades del Régimen y las circunstancias más que sospechosas de su muerte, además de la apropiación que hicieron del cadáver los falangistas y un entierro tan precipitado, dadas las fechas que eran".
Fusilamiento en Nochevieja
Esa madrugada del 1 de enero de 1937 fusilaron en las tapias del cementerio de Salamanca a 11 personas del ayuntamiento de Béjar, entre los que se encontraban el alcalde, el secretario y varios concejales. "Les sacaron de madrugada y les pasearon por la Plaza Mayor antes de la ejecución para que vieran la 'juerga' de Nochevieja y de allí los llevaron a la tapia donde los ejecutaron", han expresado.