La Audiencia de Navarra condena a 20 meses de prisión a un entrenador de fútbol por exhibicionismo a jugadoras menores

El acusado, que carece de antecedentes penales, se enfrentaba a una pena de hasta 16 años de cárcel que le reclamaba la acusación particular al considerar que también había cometido delitos de ciberacoso y de abuso sexual con prevalimiento.

En los dos casos tras recibir una invitación de las menores para participar en Snapchat con el fin de comentar cuestiones relativas al equipo y a los entrenamientos, el condenado les envió mensajes con fotos en las que aparecía desnudo e incluso vídeos en los que se masturbaba, así como realizando proposiciones del todo inapropiadas. 

El acusado negó los hechos en el juicio, reconoció que mantuvo charlas inapropiadas pero que su intención en todo momento era ayudarlas y animarlas en su vida y relaciones. Pero el Tribunal afirma que sus "explicaciones no resultan creíbles y sí forzadas". Sin embargo, la Audiencia considera verosímil la versión de las víctimas, que cuentan además con pantallazos de los comentarios que les hacía y compartieron en algunos casos con compañeras del equipo su temor por el contenido que recibían.

Durante el proceso judicial ambas menores manifestaron que la actuación del acusado les había inquietado y les había hecho sentir miedo y vergüenza por ser una persona a la que veían a menudo y que era su entrenador.