La Liga ASOBAL madruga esta temporada. Ya está aquí. Y lo hace para nuestro balonmano con una doble cita de tamaña dificultad. En el partido de la jornada, Bidasoa Irún recibe al FC Barcelona (16.45 horas) y Anaitasuna rinde visita al Cuenca (21 horas).
Cuarto clasificado del último curso, el conjunto amarillo afronta una temporada notablemente distinta respecto a las últimas, al haber determinado la EHF, máximo organismo europeo, su no participación en la European League. Por ello, solo se centrará en la competición doméstica, tanto la liga como la copa del rey, en la que quedó en su última participación el mal sabor de boca de quedar eliminados en Málaga a las primeras de cambio.
Cuétara: "Partido atractivo, acabarlo y sentirnos orgullosos"
Jacobo Cuétara lo tiene claro y manda un mensaje a su gente: "Con ganas de jugar ante nuestra afición. Va a costar conseguir una entrada y eso es importante. Partido atractivo, que antes la gente venía a ver al los jugadores del Barcelona y ahora viene a ver a su equipo competir ante el Barcelona. Es un salto importante. En base a eso, tenemos que luchar y ser lo más competitivos posible".
Respecto a cruzar tan pronto el camino con el gigante blaugrana, insultante vencedor del torneo durante los trece últimos trece años, el técnico asturiano, que ya va a cumplir su octava campaña al frente de la escuadra guipuzcoana, manifiesta que "suele ser mejor a principio, lo que pasa es que ya han jugado la Supercopa Ibérica, tres partidos de Liga y un torneo mítico e interesante en Bosnia con grandes equipos. Tiene más rodaje, va a ser peor que en otros momentos Pero no tenemos que pensar tanto. Pensar en nosotros, hacer un buen trabajo y sentirnos orgullosos".
Ya concluido el partido de Irún, a las 21 horas, se inicia la andadura de Anaitasuna en esta máxima categoría, un año más, ya el cuarto dirigido por el gallego Quique Domínguez, con contrato hasta 2025. El choque inaugural tiene lugar en El Sargal de Cuenca ante el cuadro manchego, segundo de la pasada liga.
Los navarros tienen ante sí la oportunidad de no pasar los apuros vividos durante el curso pasado, al acabar decimoterceros y apenas a cuatro puntos del descenso, que acabaron por sufrir Guadalajara y Cisne Pontevedra.
