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Eskola Bikaina Denontzat, la mesa promovida por el Gobierno vasco para la identificación de programas y acciones que marcarán la hoja de ruta contra la segregación escolar y a favor de la inclusión, la equidad y la eficacia escolar, ha activado esta mañana la tercera fase del proceso, en la que han empezado a definir las medidas concretas necesarias a través del testimonio de diferentes centros educativos, con el objetivo de "saltar a la práctica" y que toda la comunidad educativa "se implique realmente" para que todo el alumnado pueda "tener un recorrido académico y social de impacto" en Euskadi.
Así lo ha declarado la consejera de Educación, Begoña Pedrosa, al finalizar el cuarto encuentro de la Mesa celebrado este miércoles en el Centro Cultural Montehermoso de Gasteiz, donde han acudido como "invitados protagonistas" varios equipos directivos de centros que se han ido integrando durante el último año y medio.
"Es importante escucharles, que sean ellos y ellas los que realmente cuenten cómo se vive un proceso de integración, con el objetivo de que la comunidad educativa se implique realmente para que todo el alumnado pueda llegar lejos, ascender socialmente y tener un recorrido académico y social de impacto", ha detallado la consejera.
Centros, padres y comunidad
En sus palabras, "alinear a los equipos directivos de nuestros centros, a los padres y a toda la comunidad con este cambio que estamos haciendo, es fundamental si realmente queremos construir una escuela exitosa de cara al futuro, y eso es lo que se ha puesto hoy sobre la mesa".
A través de una dinámica participativa, los agentes se han distribuido en grupos de trabajo para el debate y puesta en común de las posibles iniciativas, basadas en tres líneas estratégicas: fomento del éxito escolar, gestión de la oferta y escolarización, y familia y políticas de actuación conjunta entre administraciones.
Las medidas que se vayan perfilando en esta fase se desarrollarán y priorizarán en los próximos meses y constituirán la base de la hoja de ruta educativa que el Departamento de Educación implantará progresivamente para transformar el sistema educativo. "En enero seguiremos trabajando y definiendo cuáles son y qué forma deben tomar el proyecto y la acción", ha declarado Begoña Pedrosa.
Experiencia de los centros
El intercambio de experiencias y el testimonio de los centros educativos que han vivido o están en el proceso de fusión constituye un "elemento fundamental de esta fase", ya que ofrece un "contexto muy valioso para la toma de decisiones", ha indicado Pedrosa.
Para esta sesión han contado con responsables del centro Anaitasuna de Ermua, resultado de la integración entre la ikastola Anaitasuna y Ongarai eskola, y de la futura Errota Eskola de Gasteiz, que integrará Landazuri Ikastola y el centro Santa María el curso que viene.
"Ante este proceso de integración, al principio, tuvimos miedo. Una vez reflexionada la situación de incertidumbre, nuestro primer paso tenía que ser desde la confianza", ha declarado la directora de Anaitasuna, Alazne Agirregomezkorta.
En su caso, están encontrando "dificultades para modelar y remodelar diferentes situaciones", como la necesidad de más espacio o un nuevo comedor. "Esta nueva realidad va a generar cambios en nuestro pensamiento", ha reconocido. "El proceso de unión no es una fórmula de uno más uno, dos. Durante el proceso hay que poner en valor los principios y la identidad de cada escuela y construir nuevos objetivos", ha destacado el representante de Errota Eskola, Diego Colino, que ha asegurado que "la fusión no termina en el curso 26-27, sino que es un proceso que seguirá año a año".