Polideportivo

El Surne Bilbao Basket, a rearmarse tras rendir de más a menos

Tras su gran arranque, llega al primer parón competitivo con cuatro derrotas seguidas y con su ataque terriblemente desacertado
Michale Kyser y Francis Alonso, en una acción defensiva ante el Tenerife.

Si se analiza el fondo del asunto, lo que tiene que ver exclusivamente con la situación en la tabla clasificatoria, el Surne Bilbao Basket ha alcanzado el primer parón competitivo de la Liga Endesa en una buena situación, con un balance de tres victorias y cuatro derrotas, ubicado en la 12ª plaza y con dos triunfos de colchón con respecto a la zona de descenso, en la que se ubican Betis y Baxi Manresa, con el mismo balance que el Casademont Zaragoza. El problema aparece cuando de examinar las formas, el juego, las sensaciones y las dinámicas, se trata. El equipo de Jaume Ponsarnau aterriza en estas 'ventanas' FIBA habiendo perdido sus últimos cuatro partidos de la Liga Endesa, habiéndose visto muy a merced de sus rivales en sus últimas tres salidas (Granada, Lugo y Tenerife) y con el colectivo brutalmente desacertado a la hora de buscar el aro rival, sobre todo su batería exterior.

A día de hoy, el conjunto vizcaino es, y con diferencia, el peor equipo de la ACB tanto en porcentaje de acierto en tiros de dos puntos (42,9%) y de triples (30,2%), varios de sus jugadores importantes atraviesan por profundas crisis de efectividad y confianza y conviene buscar soluciones antes de que el mal se convierta en endémico. Sin urgencias, pero sin dejar pasar demasiado tiempo.

Este parón puede resultar beneficioso para resetear las mentes de los jugadores cuyo rendimiento ha descendido, para recomponer esquemas y seguir trabajando para mejorar los engranajes grupales. Serán finalmente tres los jugadores que acudan a la llamada de sus selecciones, ya que Francis Alonso ha sido convocado por Sergio Scariolo y Ludde Hakanson y Denzel Andersson jugarán con Suecia.

Agustín Ubal había entrado en la lista de Uruguay, pero ha preferido quedarse en Bilbao para seguir su periodo de recuperación y puesta a punto después de que una enfermedad vírica retrasara su disponibilidad en el amanecer del curso y Emir Sulejmanovic ha sido sometido este lunes a pruebas médicas para valorar el alcance de la lesión en su ya maltrecho tobillo izquierdo, de nuevo dañado en el encuentro del pasado domingo ante el Tenerife. A falta de saber cuándo podrá regresar al trabajo un Nikola Radicevic cuya ausencia ha alterado el ecosistema de la rotación exterior bilbaina, Ponsarnau tratará de acumular sesiones de trabajo en Miribilla estas dos semanas con el mayor personal posible.

Y es que rearmarse, seguir incidiendo en el proceso de mejora grupal del que Ponsarnau lleva hablando desde antes incluso de que llegaran las derrotas, se antoja vital para corregir el rumbo, recuperar las buenas sensaciones y evitar profundizar en una dinámica negativa. El regreso de la competición dentro de doce días depara la visita del Fuenlabrada al Bilbao Arena y a continuación tocará medirse al Casademont Zaragoza a domicilio, dos citas que pueden ejercer de efecto bisagra hacia la reanimación o hacia los problemas.

08/11/2022