En Nochevieja suele pasar que la cena se alarga, hay muchos platos y, cuando llega el momento del postre, apetece algo ligero, de esos que se comen en un par de bocados y no obligan a sentarse otra vez “a comer”. Por eso funcionan tan bien los dulces de formato pequeño, pensados para la sobremesa, para acompañar el café o para seguir picando mientras se charla.
En ese momento encaja la piña confitada bañada en chocolate negro de Lidl. No es el típico postre de cuchara ni una tarta que haya que cortar; es más bien un dulce para sacar en una bandeja, dejarlo en el centro y que cada uno vaya cogiendo según le apetezca. En una noche con tantas pausas ese tipo de producto se integra de forma natural y va de la mano con el espíritu de la velada.
Qué es exactamente
El producto es, tal cual, piña confitada recubierta con chocolate negro. Esa combinación suele gustar porque une el dulzor de la fruta confitada y el contraste más intenso del chocolate. Para una mesa de fiesta, además, tiene ese punto de estética que queda bien en una presentación sencilla y para nada aparatosa.
Otra cosa práctica que tiene es que al ser un dulce ya preparado, te evita el estrés de cocinarlo y vigilarlo a última hora. No exige horno, ni frío, ni montaje. Si al final la gente está muy llena, siempre puedes dejarlo para más tarde, cuando baje un poco la carga de la cena.
Piña confitada de LIDL
Este dulce forma parte de la gama Deluxe de Lidl y está rebajada de 3,49 euros a 2,79 euros. Es sin ningún lugar a dudas, una de las mejores opciones para cerrar la noche esta Nochevieja.
Los beneficios de la piña
Más allá del formato y del chocolate, el ingrediente principal es la piña, una fruta que tradicionalmente se asocia a una mejor digestión. Su contenido en bromelina, una enzima natural, se relaciona con la ayuda en la descomposición de las proteínas, algo que suele mencionarse especialmente después de comidas copiosas como las de Navidad y Nochevieja.
Además, la piña destaca por su alto contenido en agua, lo que contribuye a una sensación de ligereza al final de la comida. Por eso, incluso cuando se presenta en versiones confitadas o dulces, sigue siendo una fruta que muchos asocian con un cierre más llevadero que otros postres más densos.Otro de los puntos a favor de la piña es su aporte de vitamina C, un nutriente relacionado con el sistema inmunitario y con la sensación de frescor en boca. En una cena larga, con sabores intensos y platos potentes, ese punto refrescante ayuda a limpiar el paladar y a terminar con una sensación más equilibrada.
También aporta minerales como el potasio, que suele mencionarse en relación con el equilibrio de líquidos en el organismo.