El Gipuzkoa Basket ha llegado con todo a su favor para meterse en los playoffs de la competición. Recibe esta noche (21h.) en Illunbe al Ourense, otro equipo que también tiene opciones pero que, a priori, menos que los donostiarras, que solo dependen de ganar su partido.
Los resultados positivos que ha logrado el GBC en los dos últimos meses, ocho victorias en diez partidos, han permitido al equipo de Mikel Odriozola situarse de forma inmejorable de cara a ocupar un puesto de playoffs, algo que en su momento estuvo muy lejos de plantearse.
Además y contando con el triunfo de los guipuzcoanos, habrá que esperar lo que ocurre en el partido entre el Tizona y el Obradoiro, ya que el GBC podría ser octavo o noveno. Incluso perdiendo y según qué carambola, también entraría en esas plazas con premio.
Odriozola intuye un partido duro: "Lo va a ser porque el Ourense es uno de los equipos que mejor jugó al principio de la temporada. Después, las lesiones le han obligado a reestructurarse todo el rato", apuntó el técnico del Gipuzkoa Basket.