Tal día como hoy, un 27 de mayo de 1931, dieciocho alcaldes de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa se dieron cita en la Diputación Foral de Navarra con una meta histórica: redactar y sacar adelante el primer Estatuto Vasco. El lugar elegido: Estella-Lizarra. El contexto: la reciente proclamación de la Segunda República Española.
La iniciativa, impulsada por los propios municipios y coordinada por la Sociedad de Estudios Vascos -Eusko Ikaskuntza-, pretendía dejar lista una propuesta de autogobierno antes de las elecciones a Cortes Constituyentes del 28 de junio. La cita culminaría semanas después, el 14 de junio, en una magna asamblea donde 427 alcaldes de un total de 548 votaron a favor del texto. Pero el sueño no llegó a cristalizar: la República nunca llegó a aprobarlo.
Aun así, aquel 27 de mayo marcó un hito. Fue el punto de partida de una aspiración política que, pese a las dificultades, echó raíces profundas en la memoria colectiva del pueblo vasco. En este episodio, recordamos aquel momento clave en la historia del autogobierno vasco.