Diez años del debut de Oyarzabal con la Real

Qué son diez años. El 25 de octubre de 2015, los realzales asistieron al nacimiento de una estrella. En el Ciutat de València, en una contundente victoria por 0-4 ante el Levante, debutaba con el primer equipo Mikel Oyarzabal a manos de un David Moyes que iba ser fulminado pocas semanas después. Un joven canterano, de Eibar, que había viajado con el equipo a Escocia unos meses antes en pretemporada, saltaba al campo levantinista sin saber en ese momento en lo que se iba a convertir diez años después.

Aquel debut fue solo el comienzo de una trayectoria imparable. El primer gol oficial no se hizo esperar mucho: llegó en febrero de 2016, en otra goleada (0-5) ante el RCD Espanyol, sellando su irrupción. Desde entonces, Oyarzabal ha tejido una historia de fidelidad y rendimiento que se traduce en cifras de récord. Con 406 partidos oficiales jugados hasta la fecha, el 1" de la Real se prepara para entrar esta temporada si todo va bien en el prestigioso Top 10 de jugadores con más encuentros en la historia del club, un hito que subraya su regularidad y trascendencia. Ahora mismo es 13º. Es el Segundo Máximo Goleador. Su olfato goleador lo ha encumbrado como el cuarto máximo artillero en la historia de la Real Sociedad, con 117 goles. Su efectividad es demoledora, promediando un gol cada 252 minutos de juego. Un dato que, además, le permite presumir de haber superado la marca de goles en menos partidos que otro mito txuri-urdin, Roberto López Ufarte.

Rey europeo

Con Mikel la Real ha ido a Europa en seis ocasiones, y esto lo lleva a otra dimensión. Oyarzabal es el máximo goleador histórico del club en competiciones europeas, el máximo goleador en la Europa League con diez dianas y ocupa el sexto lugar en la tabla de goleadores de la Real en Champions League. 

Más allá de los datos, la figura de Oyarzabal es indescriptible. Jugador generacional que rechazó ofertas de clubes mucho más potentes, por la razón que fuera, para quedarse aquí. Capitán dentro del campo, discreto fuera, sin Mikel nada de lo que hemos vivido hubiera sido posible. La competitividad que hemos visto en este equipo es gracias a que líderes como él aparecieron. Y diez años después de aquel día en Valencia, Mikel Oyarzabal sigue siendo el presente y el futuro de la Real Sociedad, un 10 forjado en Zubieta que ya es una leyenda del fútbol vasco. Por otros tantos, Mikel.