La continuidad del técnico irundarra, que asumió el cargo en abril de 2025 de forma interina de cara a esta presente temporada, pende de un hilo extremadamente fino. El inicio liguero ha sido desastroso, con solo 5 de 24 puntos posibles y la Real Sociedad hundida en la decimonovena posición, en plena zona de descenso. Estos números son un toque de alarma que evoca destituciones traumáticas en el pasado reciente del club.
Ayer por la tarde el Consejo de Administración celebró una reunión ordinaria como apunta el Noticias de Gipuzkoa, y parece haber tomado una decisión sobre la continuidad del entrenador. Todo apunta a que Sergio Francisco recibirá una última oportunidad al frente del banquillo txuri-urdin, con el trascendental partido contra el Celta de Vigo el próximo 19 de octubre marcado en el calendario como un ultimátum.
El encuentro en Balaídos no será un partido más; será una verdadera final anticipada entre dos equipos inmersos en la zona baja de la tabla. El resultado dictará la sentencia del 'match-ball' que, a primera hora de esta mañana, se perfila como la decisión oficial del Consejo, que tampoco es descartable que ya esté buscando sustituto.
La Real necesita con urgencia una victoria que sirva de oxígeno, tanto para la clasificación como para la moral de un vestuario visiblemente tocado. Y este parón que acaba de empezar se le va a hacer especialmente largo. Ya se le está atragantando y estamos a martes. Si los próximos tres puntos viajan a Donostia, Sergio podrá ganar algo de tiempo y tranquilidad, aunque la duda ya está inmersa en la planta noble de Anoeta. La Real va a tener que demostrar un cambio total de dinámica en el próximo carrusel de encuentros (Celta, Seviilla, Athletic y Elche) si quiere mantener a su actual entrenador en su puesto. De lo contrario estaríamos en la antesala de la primera destitución en más de un lustro en el club.