El pasado 8 de agosto entró en vigor en Artziniega la nueva Ordenanza municipal reguladora de la protección, bienestar y tenencia responsable de los animales de compañía, que trae algunas novedades que tanto las personas propietarias de animales como las que no lo son, deben conocer.
En este sentido, el Ayuntamiento llevará a cabo en las próximas semanas una campaña de difusión de las nuevas normas, si bien, están ya en vigor y su incumplimiento puede acarrear multas de entre 100 a 3.000 euros.
Al igual que con la anterior Ordenanza, en el caso de los animales de compañía de la especie canina, “en las vías y espacios públicos urbanos, se mantendrán sujetos por una correa adecuada a las características del perro y con una longitud máxima de dos metros, excepto en las zonas de esparcimiento como la habilitada en La Bárcena o en la campa de la Encina aunque aquí de manera controlada, salvo entre los meses de octubre a abril, en que podrán estar sueltos”, han recordado desde el Ayuntamiento.
De igual manera, queda expresamente prohibido el acceso y la permanencia con animales de compañía en las vías y espacios públicos destinados a zonas de juegos infantiles, parques biosaludables y pistas multideporte. “Por ejemplo, en toda la zona deportiva de La Bárcena salvo en el espacio habilitado para ello”, han matizado.
Asimismo, está prohibido atar animales de compañía en elementos del mobiliario urbano público como bancos, pivotes o farolas, así como junto a aceras, zonas de paso de viandantes, y establecimientos comerciales o de hostelería.
Descanso nocturno
“ Desde las 22.00 horas hasta las 07.00 horas esta prohibido dejar en patios, terrazas, galerías, balcones o jardines privados animales domésticos que perturben el bienestar y descanso nocturno ”
Otra novedad es que se prohíbe terminantemente, desde las 22.00 horas hasta las 07.00 horas, dejar en patios, terrazas, galerías, balcones o jardines de comunidades de propietarios o de vecinas (viviendas unifamilares adosadas o bloques de pisos), animales domésticos que perturben el bienestar y descanso nocturno del vecindario.
Se recuerda, además, que la persona responsable que conduzca un animal de compañía por la vía pública deberá adoptar las medidas necesarias para evitar que las deyecciones y los orines del animal ensucien la vía pública. “En el caso de los orines, las personas conductoras de animales de compañía tendrán la obligación de usar agua o productos biodegradables para eliminarlos de forma inmediata en fachadas, superficies pavimentadas y mobiliario urbano”, han incidido.
La nueva norma pretende ser un instrumento que establezca un marco de convivencia cívica y respetuosa. Su otro gran objetivo es garantizar un trato adecuado y digno a los animales, evitando conductas irresponsables.