Graves disturbios en la tarde del domingo en pleno centro de Gasteiz tras una concentración en la plaza de la Provincia convocada por la Falange Española. La Ertzaintza detenía a 19 personas por un presunto delito de desórdenes públicos, entre ellas un menor de 18 años, después de que dos centenares de jóvenes lanzaran piedras y objetos a los manifestantes de la Falange que también respondían a la agresión.
La calma de un soleado domingo al mediodía se rompía de forma abrupta cuando la Ertzaintza se veía desbordada por los enfrentamientos más graves vividos en la capital vasca en los últimos años. Se producían entre los asistentes a una concentración de la Falange y un grupo de encapuchados y vestidos todos de negro que comenzaron a lanzar piedras y mobiliario de las cafeterías cercanas a quienes asistían al evento convocado por la organización ultraderechista, donde hubo saludos fascistas y se cantó el Cara al sol, el himno del franquismo.
Batalla campal
Ello a pesar de que la Ertzaintza había movilizado varias furgonetas de la Brigada Móvil, un dron y un helicóptero para controlar que no se produjeran incidentes entre grupos radicales, al inicio de una concentración de personas de la Falange convocadas a favor de la unidad de España. Pese a que los concentrados se encontraban rodeados por la Ertzaintza, los contra manifestantes lograron romper el cerco policial lanzándoles piedras, botellas, adoquines, mesas, sillas y sombrillas.
La Ertzaintza se veía obligada a cargar, pese a lo cual seguían los violentos enfrentamientos en los alrededores del edificio de la Diputación alavesa. Los incidentes derivaban en una auténtica batalla campal en el que se golpeaban con palos entre unos y otros y los enfrentamientos se extendían a varias calles céntricas de Gasteiz, donde los alborotadores quemaban algunos contenedores urbanos, según informaba la Ertzaintza en un comunicado.
Además, varios recursos sanitarios se dirigían también a la Plaza de la Provincia para atender a las decenas de heridos en los incidentes, entre ellos, una veintena de agentes de la Ertzaintza que resultaban con contusiones leves. La Policía Autonómica ha indicado que la investigación continúa abierta, después de que haya detenido a 19 personas.
El viceconsejero de Seguridad, Ricardo Ituarte condenaba los hechos, ensalzaba el trabajo de la Ertzaintza para devolver el orden a las calles de Gasteiz y tachaba de fascistas a los dos bandos de radicales enfrentados. "Una concentración convocada por un grupo de personas fascistas, desgraciadamente, se ha encontrado con lo que buscaban: la respuesta de los que son los fascistas vascos. Personas que, una vez más, han provocado incidentes y han atacado directamente a los y las agentes de la Ertzaintza que estaban velando por el orden y la seguridad de la ciudadanía", denunciaba. "No vamos a tolerar este tipo de hechos que nos recuerdan a tiempos pasados", añadía.
Por su parte, la alcaldesa de Gasteiz, Maider Etxebarria, mostraba en sus redes sociales su condena y rechazo a estos incidentes, que, según indicaba, son la demostración de lo que generan los discursos radicales, odio y violencia. Así, remarcaba que estas actitudes no tienen cabida en la ciudad, tiempo que agradecía la labor policial y apoyaba a quienes resultaron heridas o sufrido daños en sus negocios.