El entrenador ha sido claro. Valverde ya denunció previamente que el Athletic juegue tres partidos en seis días, en algunos casos sin las 72 horas de descanso recomendadas entre encuentros.

Según él, la diferencia entre tener tres días de recuperación frente a sólo dos o menos no es pequeña, sino que puede afectar el rendimiento, la preparación táctica, la recuperación muscular y la salud de los jugadores.

Una semana sin descanso

A pesar de que esta queja venga arrastrándose bastante tiempo, esto ocurre a raíz de los próximos encuentros que tendrán los bilbaínos esta semana:

-Domingo a las 14:00 ante el Elche en el Martinez Valero

-Miércoles a las 18:45 ante el Qarabag en San Mamés 

-Sábado a las 18:30 ante el Getafe en San Mamés

Solo 2 días de descanso entre partido y partido para preparar al máximo cada duelo. 

No es la primera vez que los de Ernesto Valverde se ven sometidos a estos calendarios tan apretados. La pasada temporada los leones en plena lucha por Liga, Copa y Europa League vieron como la RFEF oficializaba el partido entre Athletic y Osasuna de Copa del Rey un jueves teniendo el Athletic partido liguero el sábado ante el Celta de Vigo. Finalmente La Liga acabó modificando el horario del Athletic - Celta al domingo.

No es solo el vestuario quien protesta. Los seguidores del Athletic han mostrado su indignación por los horarios asignados, especialmente aquellos partidos en jueves a horas tardías, partidos entre semana o en franjas que dificultan la asistencia (por razones laborales, de transporte o simplemente logísticas).

Un ejemplo muy claro fue una protesta en San Mamés por parte de la Herri Harmaila (una grada de animación) ante dos partidos consecutivos jueves a las 22:00 horas. Consideran que este tipo de programación supone "un manifiesto perjuicio para la afición".

La principal queja del Athletic gira en torno al margen mínimo de recuperación entre partidos. Los jugadores necesitan tiempo no solo para recuperarse físicamente, sino para preparar tácticamente los siguientes choques, recuperarse mentalmente, evitar lesiones y mantener un rendimiento aceptable. Valverde insiste en que pasar de 3 a 4 días de descanso marca una diferencia real. 

¿Cuál es el motivo?

La Liga y los clubes han cedido gran parte del control de los horarios a los contratos de televisión. Estos buscan maximizar audiencia, prime time, internacionalización, etc., lo que puede chocar con criterios deportivos o sociales como el descanso de jugadores o la comodidad de los aficionados.

El calendario moderno de fútbol profesional obliga a encajar Liga, Champions, Copa, parones de selecciones… Esto obliga a condensar los partidos. Las ventanas FIFA, los desplazamientos, los viajes internacionales complican aún más que un partido se pueda reagendar fácilmente.